28 de marzo de 2015

S.O.S


En caso de enamoramiento no te asustes ni te alejes de mi (suspiró). Tengo ganas de abrazarte y de que me abraces. Tengo ganas de besarte el cuello y los labios. Tengo ganas de caminar de tu mano por el parque de la vida. Tengo ganas de sentirte de estar solos. Tengo tantas ganas de verte todos los días. En fin tengo tantas ganas de todo que no puedo hacer nada (dijo en voz baja). Hagamos lo imposible (dije y el fingió no escucharme). Hagamos como que nada de esto pasó dijo y nunca supo todo lo que dolió.

19 de marzo de 2015

Táctica y estrategia


Es confuso, porque todos los puntos finales los pones vos. Con los ojos. Siempre es cuestión de tiempo, tengo todas las preguntas que siempre quise hacerte y resulta que ya sé las respuestas. Fue muy fácil para mi ponerte en ese lugar. Antes de que nos detuviéramos en esta estación, de un tal vez para vos y un infinito para mi, tuve la delicadeza de aprender a esperar lo que nunca llegó. Ahora puedo leer la respuesta final en tus ojos llenos de espacio. Las agujas del reloj continúan girando y me puedo dar el lujo de jugar tu juego. Cuerpo a cuerpo. Cabeza a cabeza. Abran fuego, banderas negras. Jaque Mate. Soldado caído.

17 de marzo de 2015

Sudestada


Siempre es más fácil decir que hacer. Que cobardía la de apuntar al otro con el dedo, eso de nunca mirarse a uno mismo, si los espejos pudieran ver decidirían no hacerlo. Yo tampoco lo haría. Nunca hay que olvidarse que la vida es un boomerang, todo vuelve mi amor como vos decís.

12 de marzo de 2015

Volátil


No sé ponerle fin a la situación sin un frío desdén, y es ahí cuando pienso que mis ojos ya no van a mirar tu boca ni abrazar tu espalda por las noches. Duelen los golpes de lo cruel que eso me hace sentir, tan frágiles resultaron los suspiros que se transformaron en promesas. Todas ellas inconclusas, seguramente sin finales felices. No existe un futuro cuando el lugar al que nos dirigimos es ninguna parte. Todo es tan volátil como si se tratara de un sueño sin cordura en el que no me puedo despertar. Los impulsos se transforman en pesadillas y lo inconstante se vuelve una realidad.